dormido el monje,
una ligera brisa
pasa las hojas
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Datos personales
- el iosu
- En Euskalherria, hace 58 años, se abrió un paréntesis... y aún hoy no sé si me arrojaron o simplemente nací. Eran tiempos de oscuridad. Luché por crecer cuanto me dejaron. En la desesperada búsqueda de la verdad, descubrí que mis raíces crecen en toda tierra, que un solo mar son los mares y que todas las sendas llevan al corazón humano. Me gusta jugar con letras y con tiempos, que es la mágica manera de sacar de la chistera del azar, flores, conejos y palomas, con los que cruzar los espejos de los sueños.
Acarciando con ternura el viento cada letra de tu bello poema...
ResponderEliminarTe dejo besos con cariño
Y qué gran cantidad de sensaciones se pierde por estar domido!
ResponderEliminarSalud y haikus!
Hay libros que uno desearia que pasara una brisa para ayudarnos a leerlo, verdad?
ResponderEliminarUn beso
Flor
La suave brisa, como pócima hipnótica, ha llevado al monje al paraiso de los sueños,así ella tranquila hojea el libro, tal vez quiera descubrir "Lo que el viento se llevó" o como buscar "La sombra del viento" o huir de "Vientos de Guerra" y nadar en "Vientos de Agua"
ResponderEliminarLas situaciones acontecen de formas sencillas y placenteras... sobre todo para el observador.
ResponderEliminar